Su trabajo consiste en crear la plataforma de
la Nueva Religión Mundial, de síntesis
amorosa. La plataforma contendrá
tres presentaciones principales,
Demostrar la
realidad del Espíritu de Dios, trascendente e inmanente, y también una realidad
similar en relación con el hombre.
Demostrar la cualidad
divina de las fuerzas de las naturaleza y del hombre, y el método para usarlas para
propósitos divinos.
Demostrar que la
humanidad como un Todo es expresión de la divinidad, más la realidad de la
naturaleza y trabajo de la Jerarquía, y el método de acercamiento recíproco.
El objetivo es triple:
1. Invocar
el alma de la humanidad y expresarla
más libremente en el plano físico, a. Estimulando las almas de los hombres,
acrecentando la afluencia del principio crístico de amor, como comprensión,
buena voluntad, colaboración y paz mundiales. b.Estableciendo una vibración tal
que atraerá una respuesta de la atenta y expectante Jerarquía y
2. Establecer
una relación más estrecha con Shamballa, el tercer centro mayor divino en
nuestro planeta. De ese centro surge la voluntad de Dios, y el poder de Dios se
convierte en el mensajero de Su voluntad.
Este contacto directo se producirá si la
Gran Invocación es empleada por aspirantes y discípulos en colaboración con
la Jerarquía.
La expresión de la voluntad divina será el tema de
la futura religión mundial; hoy su verdadera expresión es necesaria como
fuerza impulsora y expulsora, y también como agente esclarecedor y purificador.
Por lo tanto la energía de Shamballa está relacionada con la vivencia (por
medio de la conciencia y la forma) de la humanidad;
Dos efectos se producirán de inmediato: la Voluntad de Dios despertará la voluntad
al bien que, practicada por los discípulos del mundo, florecerá como buena
voluntad en toda la humanidad. Se
constituirá un Triángulo Planetario, que promoverá la circulación de
energías espirituales entre los tres centros, Samballa, Jerarquía y Humanidad (chakras coronario, corazón y
garganta de la conciencia planetaria).
La libre circulación de energía entre los
tres centros motiva esta frase mántrica.
Conocemos, Oh Señor de Vida y Amor la
necesidad;
conmueve nuevamente nuestros corazones con
amor, para
que nosotros también podamos amar y dar.
3. Cuando la Gran Invocación es
correctamente empleada ciertas energías
extraplanetarias pueden ser atraídas por
el Regente de Shamballa, Estas fuerzas son dos categorías: solares interplanetarias y cósmicas. Si
este planeta es conciencia espiritual -como lo evidenciamos en nuestro estado meditativo
o de mayor lucidez en que contactamos los tres grandes centros-, los demás
planetas y las estrellas también son grandes Seres espirituales. Por medio de
Samballa seremos cada vez más conscientes de las calidades de las energías que
nos envían.
El surgir de la nueva religión mundial tendrá, necesariamente,
profundas dificultades; está muy cercano y las diferencias son relativamente
superficiales, porqué la juventud inteligente de todos los países repudia rápidamente
la teología y el control de la iglesia, está profundamente interesada en
los valores espirituales y busca seriamente verificar su reconocimiento. A
Cristo Le interesa más la persistencia en la búsqueda de la verdad y la
experiencia espiritual subjetiva. La espiritualidad reemplazará a la teología y
la experiencia viviente tomará el lugar de las aceptaciones teológicas. El
aferramiento de las órdenes eclesiásticas se debilitará y desaparecerá. Sólo
permanecerán como guías y conductores del espíritu humano quienes hablen desde
su experiencia viva.
La nueva religión mundial debe estar basada en estas
cuatro verdades que resistieron las pruebas de las edades:
1. La Realidad de
Dios.
2. La Relación del hombre con Dios.
3. La Realidad de
la Inmortalidad y la Persistencia Eterna.
4. La Continuidad de la Revelación y los
Acercamientos Divinos.
Otras dos
grandes realidades fundamentales son también parte de la conciencia humana.
5. La realidad de
nuestra mutua relación, realidad
espiritual fundamental como lo es Dios Mismo, porque está vinculada a nuestro
conocimiento de Él, como Padre. La denominamos “hermandad” y se expresa por medio de las rectas relaciones humanas.
6. La realidad del
Sendero hacia Dios.
Las iglesias
pueden cesar de perpetuar la forma externa visible y empezar a considerar la
realidad que subyace en todos los dogmas y doctrinas.
Podemos
preguntarnos qué estructura deberá asumir la fe de la humanidad y qué edificio
erigirá para albergar al espíritu religioso del hombre: “mente, espíritu y cuerpo son mis templos, para que el Yo manifieste en
ellos Mi supremo Ser y devenir”.
La Jerarquía espiritual del planeta, la
habilidad del género humano para entrar en contacto
con sus Miembros y trabajar en colaboración con Ellos, y la existencia de otra Jerarquía mayor de
energías espirituales, constituyen las tres verdades sobre las cuales podría
basarse la futura religión mundial.
Estas ideas
han sido extraídas del libro “La exteriorización de la Jerarquía” de Alice A. Bailey.
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