jueves, 15 de enero de 2015

LA JERARQUÍA, EN ESTADO DE TENSIÓN, EXPECTACIÓN Y REORGANIZACIÓN (III).



Cuando profundizamos en el tema de la Jerarquía, percibimos que entramos en una realidad incluyente que nos engloba como un todo mayor. Consideramos anteriormente que los Maestros que conforman la Jerarquía eran miembros más aventajados de la familia humana. Así que formamos un todo con Ella. Podríamos llevar nuestra atención a cómo repercute en la Jerarquía la nueva iniciación que va a recibir el Logos planetario.

El Maestro DK en El Discipulado en la Nueva Era, Tomo II, páginas 64-5, nos señala la situación en que ahora se encuentran los Maestros. Afirma que ahora el poder de la vibración conjunta de los discípulos y aspirantes del mundo es -por primera vez en la historia humana-, suficientemente fuerte como para llegar hasta Shamballa. Esto hace que la Jerarquía se halle en estado de extrema tensión (podemos entender tensión como un estado interior en el que se polariza la energía hacia el logro de un objetivo). Samballa es “el Centro donde la Voluntad de Dios es conocida” y el Propósito de esa Voluntad es lograr la evolución de la conciencia, hasta que en todos los planos de Su manifestación aparezca la evidencia de que es Presencia divina. Servir á ese Propósito es incumbencia de la Jerarquía. Por eso comprendemos que se hallen en tensión por el nuevo paso a dar.

Esperaba la decisión que estaba al borde de emanar de Sanat Kumara (recordemos que El representa para el Logos planetario lo que nuestra personalidad lo es para nuestro yo superior o alma). Tal decisión la sancionó Cristo, Maitreya, en el plenilunio de Géminis del año 1945, cuando tomó la resolución irrevocable de volver a encarnarse para estar de nuevo con nosotros. Esa decisión implicaba también la reaparición de la la Jerarquía. El periodo abarca desde aquella fecha hasta el momento en que la Humanidad haya entrado mayoritariamente en el 5º reino, en la unidad del alma, en la 2ª iniciación.

El método que emplean para su exteriorización no lo conocemos perfectamente, pero sí sabemos que ya hay en cuerpo físico unos 14 Maestros, que residen en ciudades importantes del mundo; sabemos que, hasta tanto no ocurra el día de la Declaración Universal de Maitreya diciendo a toda la Humanidad que está con nosotros, Ellos permanecerán de incógnito, aunque favoreciéndonos con su alta y constante radiación controlada. Posteriormente irán apareciendo más Maestros, conforme la Humanidad se eleve y pueda resistir su creciente aportación de energía.

Cristo nos ofreció en aquella extraordinaria afluencia de energía de Géminis hacer uso del mantram que El, por su situación excelsa, mereció pronunciar por 1ª vez en la historia de la Humanidad y del planeta. Éste mantram magnífico ha sido transformado maravillosamente para pronunciarlo nosotros, sea como invocación o con poder mántrico; es la Gran Invocación. Si lo lo lo pronunciáramos en los niveles espirituales en conjunción con la Jerarquía y Samballa, los resultados serían tan grandiosos que el cambio vendría de la noche a la mañana, ya que la Jerarquía es reactiva a nuestra invocación.

Afirma también que está esperando la llamada invocativa clara de las masas humanas. Actualmente esta invocación masiva es cada vez más potente y definida. Llenan las avenidas de las grandes ciudades, clamando por derechos elementales, y son firmes y persistentes en sus reivindicaciones. Esta invocación no es tan elevada, pero es mucho más amplia, y si es poderosa porque reclaman derechos básicos.

Además, la Jerarquía se halla ahora en proceso de reorganización, comportando lo siguiente: que los discípulos avanzados o iniciados de los Ahsramas principales comienzan a formar Ahsramas secundarios; que la Jerarquía podrá influir ahora sobre un mayor número de personas, activas en muchos y diversos sectores humanos. Hoy lo podemos captar en la clara sintonía que se percibe en la enorme cantidad de personas que colaboran en las muchas organizaciones no gubernamentales, nacionales e internacionales, dedicadas a servir a la humanidad. Es una sintonía de ideas y de sentimientos de amor y servicio abnegado.

El sistema, los métodos y las técnicas del entrenamiento se están remodelando y reordenando, a fin de adaptarlos a la mente y a las necesidades modernas. Antes la preparación al Discipulado se hacía escasamente, de tarde en tarde; hoy tanta gente está preparada para la fusión con el alma, que los métodos por necesidad han de ser grupales. A su vez los discípulos avanzados pasan por un proceso forzado, que les permitirá recibir con mayor rapidez la iniciación que tienen inmediatamente por delante.  Lógicamente, traerán mayor tensión y riesgos y, a veces, hasta la muerte; también mayor luz y vida espirituales.

Como resultado de esta movida tan poderosa y general ascendente de la Humanidad, ahora la Jerarquía con más facilidad encara Su Camino de Evolución Superior (los siete Grandes Senderos de progreso extra planetario), porque las funciones que ellos están desempeñando ahora lo podrán ocupar sus discípulos, conforme alcanzan mayores iniciaciones.
Manuel


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