lunes, 14 de septiembre de 2015

COMO IRRADIAR AMOR GENUINO.



COMO IRRADIAR AMOR GENUINO.
Expresar amor genuino a la Humanidad, compuesta como esta de los individuos que tenemos cerca -siempre nos tocan cerca a los que tienen defectos y limitaciones- más todos los demás, es bastante difícil. Normalmente expresamos amor debido a un sentimiento, emoción o deseo. En términos de yoga o esoterismo diríamos que expresamos amor desde el chacra del plexo solar, desde  manipura; es el amor egoísta. El amor puro es una expresión del chacra del corazón, el cual a su vez es proyección del chacra de doce pétalos que hay en el coronario, en sahasrara. Esto quiere decir que hemos de vivir el amor desde el alma, desde la intuición de que todos somos manifestación de una misma Realidad. Esta evidencia repercute en la visión que de los demás tiene la conciencia personal. Por eso el amor puro comporta un salto cualitativo en el ser humano.
El Maestro D.K. nos presenta una meditación muy apropiada para cambiar las tendencias del chacra del plexo solar, (me viene ahora a la mente el dicho popular del plexo solar, que afirma: “nadie da nada, por nada”), por las nuevas que se evidencian despliegue de la Unidad en la diversidad. Se ha de comenzar por movilizar ese amor puro durante la meditación, cuando se logra la fusión con el alma.
La meditación que nos ofrece es la siguiente:
MEDITACIÓN PARA ELEVAR LA ENERGIA DEL PLEXO SOLAR AL CARDIACO.
“Ahora le daré una meditación personal que le servirá, así lo espero, para elevar la vida del cuerpo astral desde el plexo solar al centro cardíaco, eliminando así algunas de las limitaciones que desaparecerán cuando el cuerpo y la fuerza astrales de sexto rayo sean trasmutados y el amor al todo ocupe el lugar del amor a la parte.

1 . Asuma mentalmente la posición del Observador (te encuentras entonces, en un espacio de luz que se contempla, y que al mismo tiempo que les destellos de expansión de que eres tú).  Su mente de cuarto rayo (una de las siete energías que pueden expresarse por la conciencia humana) debería permitirle observar con desapego el conflicto entre la personalidad y el alma.

2.  Perciba la tenue luz de la personalidad y la brillante radiacíón del alma; luego observe otra dualidad, es decir, la brillante y poderosa luz o influencia del plexo solar y la vacilante y fluctuante luz del centro cardíaco.

3.  Enfoque su conciencia, por el poder de la imaginación, en el alma radiante, manténgala allí firmemente, vinculando también el alma y el centro coronarlo por el poder del pensamiento.

4.  Entone el OM tres veces, exhalando la energía del alma hacia la triple personalidad (nuestro comportamiento suele ser mental, emocional o vital; así pues, vívete como personalidad con los tres potenciales a plena disponibilidad), llevando y reteniendo esa energía (como reserva de fuerza) en el centro ajna (en el entrecejo).  Manténgala allí, aumentando la luz de la personalidad con la radiación del alma.

5.  Entonces diga:
"La luz del alma apaga la tenue luz de la personalidad, así como el sol hace desaparecer la llama de un pequeño fuego.  El fulgor del alma ocupa el lugar de la luz de la personalidad.  El sol sustituye a la luna".

6. Vierta definitivamente la luz y la energía del alma en el centro cardíaco, creyendo -mediante el poder de la imaginación creadora- que evoca una actividad vibratoria tan poderosa que actúa como un imán en relación con el plexo solar.  La energía del plexo solar es elevada o atraída hacia el centro cardíaco y allí se trasmuta en amor del alma.

7.  Manténgase como Observador, visualice el proceso contrario al anterior.  El plexo solar se apaga porque lo sustituye el brillo del corazón.  La luz del alma permanece inmutable, pero aumenta grandemente el brillo de la luz de la personalidad.

8.  Entone como alma, unida a la personalidad, siete veces el OM, exhalándole hacia su medio ambiente.

Esto, hermano mío, es más bien un ejercicio de visualización que una meditación, pero su eficacia depende de su capacidad, como observador espiritual, para conservar la continuidad mental a medida que lo realiza.  La energía sigue al pensamiento y es la base de toda práctica ocultista, y tiene primordial significación en este ejercicio.  Descubrirá que si lo practica regularmente y sin una idea establecida sobre los resultados, se producirán en su conciencia cambios duraderos y la luz del grupo será también más brillante”.


La indicación ordinaria del Maestro es la de practicarla diariamente durante seis meses al menos. El cambio de vibración del chacra plexo solar a las del chacra del corazón, entrecejo o coronario cuesta mucho de lograr. En realidad no se alcanza hasta no haber conseguido lo que se denomina “la segunda iniciación”, que consiste en vivir de forma estable y en todas circunstancias en la conciencia supermental, en vivir como almas.
Si os animáis a la práctica de la meditación, aprovechad el gran beneficio que aporta el uso de la imaginación porque facilita y consolida más rápidamente lo que estamos viviendo. Vemos que el Maestro lo recomienda. La práctica de estas meditaciones suele tener premio incluido, porque con frecuencia se producen crecientes destellos de intuición: ves con evidencia, y lo que ves, ves que eres tú.
Os animo a que practiquéis la meditación: el amor genuino que lo da todo y no pide nada a cambio estará con vosotros.




No hay comentarios:

Publicar un comentario